Ciudad
de la Gloria, Mendoza – La Santa y Nueva Argentina – 14 de noviembre de 2012
Vuelve
a hablarse del famoso tema del impuesto a las ganancias y otra vez la disputa,
la interminable discusión superflua que no va a tener nunca resolución en la
muerta Democracia Representativa.
¡Claro!
¿Cómo un trabajador va a querer poner de su trabajo frente a un sistema del que
no se siente parte? Como venimos diciendo es la democracia y su falsa
representación la que es inútil.
Nadie
quiere poner de lo suyo en medio de la contradicción y de guerras entre
distintos poderes. Nadie quiere poner nada de lo suyo si no hay común-unidad
entre los argentinos y menos cuando lo que se tiene no alcanza para vivir
dignamente. Nadie quiere poner de lo suyo cuando no decide qué es lo que aporta
y a qué va destinado.
Pero
el problema no es este gobierno, ni Cristina, sino un sistema falso en donde no
hay participación directa. http://simonsam.arieljesus.blogspot.com.ar/2012/11/basta-de-democracia-representativa.html?spref=tw
Ahora,
el que esté de acuerdo con la democracia, que se la banque y que se joda, no es
gratis delegar nuestras decisiones en otros.
Además
toda la disputa esta en el marco de una falsa economía de la escases donde se
habla de números, de billetes escasos que faltan y van a faltar más, cuando no hay escases de nada, solo de
buena política. Estamos ciegos mirando papelitos con número cuando tenemos todos los bienes en esta patria,
cuando somos ricos y nuestra primer riqueza son las Mujeres y los Varones con
su capacidad de trabajo ¿Qué escases? Tenemos tierra fértil, riquezas en
recursos y energía, materia gris y materias primas de sobra.
La solución son las Comunidades de la Nación
Argentina, que formemos comunidades en toda la Patria
donde cada uno contribuye al sostenimiento de la misma porque se siente parte,
porque es parte, porque decide. PERO ESTE SOSTENIMIENTO ES EN BIENES Y
SERVICIOS QUE ENGRANDECEN, DIGNIFICAN A LA COMUNIDAD Y ASÍ AL QUE LOS PROVEE y
no seguimos con la idea de que si me sacan, si saco, si estos tienen yo no y
toda la estupidez de la falsa economía de la escases y la competencia.
Si
formamos miles de comunidades en toda la Nación Argentina podremos tener
participación directa en las decisiones que hacen a nuestro trabajo y con
una organización comunitaria donde cada argentino participe directamente, se
puede tener acceso a las situaciones personales y familiares, donde se
evalúa que es lo que puede poner cada trabajador para sostener a la comunidad.
No hacer una tabla rasa donde a todos se les exige lo mismo porque esto es
injusto.
Entonces
sobre la base de una distribución justa
de los bienes donde alcance para cubrir las necesidades básicas en principio de
todos los miembros de una comunidad, un fabricante puede contribuir con
producción, un trabajador con el servicio que brinde, con el oficio que tenga,
los jóvenes con Servicios Civiles que hagan al mejoramiento de la calidad de
vida de la Comunidad, etc. Esto por nombrar algunos ejemplos pero hay que
recrear todas las maneras de vivir y de hacer política, que es lo mismo.
Hemos
presentado hace tiempo una nueva política con eje en La Solución Económica, un
nuevo sistema de producción,
distribución, comercio y consumo donde lo que valen son los bienes, las cosas y
no el papel. El papel solo es un medio de intercambio que no sirve más que
para esto. Es la Única Solución a la crisis mundial, al fracaso de toda esta
mentira de la democracia, es la solución al individualismo feroz que nos impuso
el régimen del anticristo.
Tenemos
que volver a Nuestro Padre que es volver
la cara a nuestros hermanos, a mirarnos y darnos cuenta que no podemos los unos
sin los otros, que si estamos divididos otros nos devoran desde afuera. Es
simple, tan simple que no entra en las cabezas enmarañadas por las
complicaciones inventadas para dominarnos ¡Despertemos
más y más! Hay otras maneras de hacer política y no las que nos proponen como
nefastas opciones: capitalismo, comunismo-socialismo, que centro, que
izquierda, que derecha…no gracias, son todos fracasos y anticuados encima.
Soy
argentino en principio, soy mucho más que una tendencia berreta, soy un hombre, estoy por encima de las
diferencias inventadas y quiero hacer algo nuevo. Ahora, vamos a tener que
meter las manos en el barro, meternos en la cruda realidad. Porque el que quiera ser el primero que se haga el
último.
Es un
trabajo, un trabajo de fe al que estamos todos llamados. Un Abrazo
}
Simón
Juan, junto a mi esposa Maru Isabel, Juana M. José y Juan Bautista
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